
Nacen dormidos
los sueños en tus labios
                                       y tu cuerpo desnudo
                                       descansa en un momento
                                       eterno
                                                                                 Arriba ha quedado 
                                                                                 el frió de la noche
                                                                                 abajo el calor
                                                                                 abandona el día
                                                                                 para siempre
 
                                                                                                                     y  ningún lugar
                                                                                                                   encerrara tu voz
                                                                                                                         para siempre
Tengo
 despierta la noche
para no traicionarme
y después
 un esclavo
escucha las palabras
de un amo
 que digo
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